Moralejas del I Encuentro de Bloggers Gastronómicos

El pasado 2 de Agosto acudimos al Centro de Congresos de Barbastro con sed de saber más sobre el lenguaje social, de actualidad también alrededor del vino. La Primera Moraleja de la Mesa Redonda sobre "El lenguaje de los blogs. El triunfo de la comunicación cercana" es la siguiente: el Somontano se llena de enoturistas en verano, durante las vacaciones o fines de semana. En total, 45.000 cada año. Así que nuestro contacto con el mundo del vino y sus amantes, desde la lejanía, debe mantenerse durante todo el año mediante una relación virtual. Así, en el momento que puedan realizar una escapada, nos tendrán en sus pensamientos. No lo tenemos del todo difícil. Hacemos grandes vinos, y ¿quién se puede resistir a un paisaje que ha enamorado hasta a Aragón Televisión?

Moraleja 2: Nos sorprendió la cantidad de juventud presente en la sala, repleta. Ellos son el futuro del vino y el futuro de una zona castigada demográficamente. Bodegueros, winelovers y vecinos de la comarca tampoco se quisieron perder la ocasión de oír a Rebeca Labara, reconocida bloguera de moda, quién moderó la charla de la 1ª Mesa Redonda de la mañana. También participaron “Pakus, futuro bloguero”, “El Cocinero Fiel”, uno de las mayores Youtuber a nivel nacional, y Ana Prieto, del exitoso blog “Recetas de Mamá”.

Enseguida notamos que la mesa se llenaría de confidencias y cercanía; Ana reconoció que es una “Adicta al Somontano” y que piensa, escribe y fotografía sus recetas como si estuviera cocinando o hablando para su hijo. Como él, “son muchos a los que no les va la cocina”.
 

Moraleja 3: Utilicemos desde las bodegas un lenguaje sencillo y fácilmente entendible para comunicar todo lo que rodea al vino, complicado de por si, a excepción de haberlo vivido privilegiadamente, como nosotros, desde el seno familiar. Y llenemos de pasión cada botella y cada línea que dirijamos a nuestros seguidores, igual como hacen estos cuatro blogueros: la clave para entusiasmar y seguir haciendo vino.

Moraleja 4: Escribir con ganas de ser leído, y esbozando una media sonrisa, requiere de cierta poesía. “De lo contrario, difundiríamos un manual de instrucciones”, según palabras textuales de “El Cocinero Fiel”. Y no queremos hacerlo, verdad?